Descripción del conflicto minero:
Las operaciones de la mina de Cananea, propiedad de Grupo México, se han caracterizado por los altos niveles de polvo tóxico y gases ácidos a los que están expuestos los trabajadores mineros, los cuales, manipulan este tipo de elementos sin un equipo de mantenimiento adecuado, generando de este modo, un ambiente de trabajo muy riesgoso para su salud por el desarrollo de enfermedades como silicosis. Por lo tanto, el 30 de julio de 2007, la sección 65 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros Metalúrgicos Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSYSRM) emplazó a huelga por la violación al Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), por la demanda de mejores condiciones de seguridad e higiene y el reinicio de las operaciones del hospital para los trabajadores mineros.
Las demandas de los huelguistas se refieren al aumento salarial, el cumplimiento de prestaciones y mejores condiciones de seguridad e higiene. La disputa es el resultado de la estrategia empresarial para mejorar su posición global a costa de los trabajadores. Es importante señalar que Grupo México era el tercer productor mundial de cobre, con grandes inversiones en Perú, Arizona y Texas. Asimismo, controla extensos ramales de Ferrocarril en México y uno de Texas, donde los principales ingresos provienen del transporte de alimentos y productos industriales (La Jornada, 13 de noviembre de 2007).
En 2011 Grupo México logró un fallo a favor para terminar la relación laboral con los trabajadores mineros de la sección 65 de Cananea y reabrir la mina con otros mineros, donde la titularidad del CCT recayó en la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), esto significó peores condiciones laborales para los nuevos mineros. No obstante, pese a que el sindicato fue notificado el 11 de julio del 2011 sobre el término de la huelga, los mineros de la sección 65 decidieron continuar y pelear por el reconocimiento del CCT. En general definieron mantenerse en la lucha ante la violación de sus derechos laborales, a la autonomía sindical y frente a las acciones ilegales emprendidas por la empresa para reabrir la mina.
Durante el conflicto laboral e inter-sindical en Cananea, tuvo lugar el derrame de 40 millones de litros de desechos tóxicos sobre el río Sonora y Bacanuchi, el 6 de agosto del 2014. Esto afectó a miles de pobladores, por lo cual, el incidente es reconocido como el desastre ambiental más grande en la historia de México, cuestión que los mineros de la sección 65 retomaron y sumaron a sus reclamos contra la empresa Grupo México (La Izquierda Diario, domingo 30 de julio de 2017).
De esta manera, los reclamos se han extendido a la falta de agua potable y se han realizado manifestaciones y amparos (Animal Político, Andrea Vega 07 de agosto de 2019). En la actualidad, a cinco años del derrame tóxico, la situación no parece mejorar en Cananea. Las irregularidades en el proceso de justicia ambiental, la contaminación, el desempleo y la crisis económica se han vuelto una constante para la región (Redacción Aristegui Noticias Priscila Cárdenas 06 de agosto de 2019).