Descripción del conflicto minero:
Esperanzados en la bonanza que una industria de este tipo traería a su tierra, los pobladores de Copiapó se agolparon el 26 de enero de 1952 para ver el momento exacto en que el Presidente Gabriel González Cortés inaugurara oficialmente la primera fundición estatal del país.
Sin embargo, el transcurso del tiempo ha hecho que las nuevas generaciones se congreguen en torno al nombre de la Fundición Paipote por razones mucho menos promisorias.
Histórica fue, por ejemplo, la convocatoria que el 25 de junio de 1994 se reunió para exigir que se frenara la contaminación que, por años, lanzó al aire de la zona una nube tóxica compuesta en gran medida por azufre y arsénico.
Un tema gravísimo por las consecuencias a largo plazo que esas emanaciones traen consigo y una falta de respeto para los productores agrícolas del sector que envían al extranjero importantes cantidades de uva cada año.
La lucha sostenida por los vecinos, determinó que se le exigiera a la empresa un plan urgente de descontaminación, el que comenzó en 1995, pero que aún no se concluye.
La Agrupación de Madres Por el Medio Ambiente Regional y la Salud (AMPARES), señaló que estudian la presentación de una querella en contra de ENAMI (empresa Nacional de Minería) por la muerte de varias personas a causa de enfermedades respiratorias en la provincia de Copiapó, debido a la inhalación de gases sulfurosos provenientes de la Fundición Hernán Videla Lira, más conocida como Paipote. Jaime Pérez de Arce, en representación de la minera, sostuvo que la crisis que enfrenta la Fundición se debe precisamente a las altas inversiones que se han hecho en torno a reducir los altos niveles de emisión que han sido parte protagónica del medio siglo de su funcionamiento.
Los directivos de la Fundición debieron iniciar su Proceso de Modernización y Descontaminación, luego de que en 1995, la zona donde se ubica la planta fuera declarada saturada de anhídrido sulfuroso y material particulado, según un decreto del Ministerio Secretaría General de la Presidencia.
Desde entonces, las opciones eran morir o bien adecuarse a la norma ambiental que entrados los años 90's se exigió para la operación de empresas en este rubro. Por este motivo, el hincapié que hace ENAMI sobre los altos costos que ha debido enfrentar para mejorar su política ambiental son sólo alardes insuficientes que no deberían separarse de los costos de su proceso productivo. En especial, porque pese a los 92,4 millones de dólares invertidos en equipos, siguen produciéndose episodios críticos de contaminación que, a lo largo del año 2001, se contabilizaron en al menos tres oportunidades.
Y porque, junto con lo anterior, existen dudas sobre las consecuencias que pueda tener en la totalidad de la región el transporte de largo alcance del anhídrido sulfuroso y las partículas finas, que siguen constituyendo una clara amenaza para los habitantes de las comunas de Copiapó y Tierra Amarilla.
A pesar las constantes denuncias, reclamos de los vecinos, la planta ha superado en varias ocasiones la norma permitida de emisiones, causando varios episodios de contaminacion e intoxicacion, ademas de varias enfermedades Nunca cumpliendo con el plan de descontaminación. La empresa actualmente tiene proyectado un plan de modernizacion.